martes, 22 de enero de 2013

SI YO FUERA MI PADRE...


Si yo fuera mi padre, iba festejar el día que supe que mi madre traía consigo un niño.

Si yo fuera mi padre, la iba a amar, protegerla y cuidarla y tenerla en mis brazos como para que ella nunca se escape.

Si fuera mi padre, cuando me vio a mí y mis hermanos nacer hubiese hecho un pacto con Dios y nunca abandonarnos.

Si yo fuera mi padre, despertaría todas las mañanas y besar a mis hijos.

Si yo fuera mi padre, escucharía el dolor de mi mujer y entender que el alcohol era mi enemigo.

Si yo fuera mi padre, dejaría a los amigos y las fiestas y dormiría al lado de mi amada, cuidándola.

Si yo fuera mi padre, haría todo lo que fuese para que un intruso no me robe mi esposa y apoderarse así de mis hijos.

Si yo fuera mi padre, pensaría mil veces que sin mí las vidas de mis hijos iba ser muy difícil.

Si yo fuera mi padre, aunque solo sea por un momento diría a mis hijos lo mucho que los amo.

Si yo fuera mi padre, correría bajo el cielo y me hundiría en el abismo buscando recuperar aquellos ojos inocentes que sufrieron por mi ausencia.

Si yo fuera mi padre, me pondría sobre la tumba de la mujer que crío y educo sola a mis hijos y la pediría “perdón”.

Si yo fuera mi padre, por un solo un día, solo eso pediría, pensaría mejor, que hoy es una gran oportunidad de ver a mis hijos aunque más grandes que yo pero poder abrazarlos y recuperar los momentos perdidos.

Si yo fuera mi padre, aunque sé que nunca seré así, aunque tú no lo entiendas padre no podría ser como tú.

Escrito por Lucio Robles – P.J.C. 2013